La completencia crea archipiélagos sanos, honestos y complementarios.
¿Formas parte de uno de ellos?
¿Qué pasa cuando unes pasión y propósito?
Nací siendo una persona muy creativa y nunca he dejado de nutrir mi creatividad e impulsarme gracias a ella. Desde muy pequeña ya sabía que mi contribución tendría que ver con algo que naciera de mí y cuando descubrí el diseño gráfico y todas sus posibilidades a nivel conceptual y de crear sentido mi camino profesional se fue generando de manera orgánica y muy gratificante. (Si quieres saber más sobre mí te invito que leas la siguiente entrada aquí.)
Transformar las marcas en islas paradisíacas para mis clientes y sus clientes es, sin duda, mi propósito. Porque todos nos merecemos habitar en un espacio paradisíaco, adaptado a lo que realmente nos llena y necesitamos. Creo que ya es momento de ponernos en primera posición, cuidarnos como nos merecemos y, en consecuencia, mejorar nuestro estilo de vida.
El resultado de todo mi esfuerzo y trabajo conmigo misma, con un poco de suerte también, me han permitido unir mi gran pasión con mi propósito. Y este momento es cuando te sientes más viva que nunca porque no solamente vives de lo que amas sino que ves una clara consecuencia positiva en tu entorno y en la vida de los demás. Trabajar en una marca no es un mero proyecto profesional, he podido ver con mis propios ojos la caridad, el foco, la satisfacción, la evolución y la sensación de autorrealización de aquellas personas con las que he trabajado.
“Cuando vivimos conectados con nuestra verdadera esencia sentimos como la vida crea a través nuestro. Eso es precisamente lo que significa
Borja Vilaseca
la palabra entusiasmo.”
Conecta con tu propia autenticidad
Cuando aprendí a ver que cuando somos capaces de abrirnos a nuestra propia autenticidad no tenemos competencia como tal mi nivel de Calma interior aumentó de manera exponencial. Porque obviamente existen, en mi caso, muchísimos estudios de diseño, freelances, packs prediseñados, el cuñado que sabe mucho y Canva, pero ninguno de ellos proporcionará de la misma manera lo que estés buscando. Y no se trata, para nada, de ser prepotente y creerse lo más sino simplemente querernos, valorarnos y saber que lo que cada uno aporta es 100% genuino. Y es eso precisamente lo que hay que aprender a comunicar.
Una vez conectas con una persona y su forma de trabajar te pueden venir mil alternativas más que seguirás eligiendo la misma. O al menos eso pasa con el círculo de personas con las que me rodeo y las clientas que vienen a la isla de Calma Studio.
“La pasión es individualista, el propósito se puede compartir.”
Chip Health, Dan Health
La completencia
De lo que se trata es de compartirnos y crecer conjuntamente. Mi intención no es, para nada, acaparar todo el mundo en mis isla de Calma Studio (uff.. no podría imaginarme mi isla llena de gente!) sino ayudar a que cada una construya la suya. Así conseguiremos tener archipiélagos de calidad, comprometidos y felices que se complementan.
Podría resumirte esta evolución con el hecho de darme cuenta que soy -simplemente- un canal. Que tengo muchísimo que aportar pero entiendo perfectamente que no será del gusto de todos y, ni si quiera, es mi intención. Cuando encuentras tu porqué, tu misión que va más allá de tu proyecto empresarial, es cuando tu visión se amplia y precisamente asumes muy felizmente que tu papel es un canal para hacer realidad e irradiar ese porqué. Aquí permítame hablar un poco de mi misión para que entiendas qué es lo que me mueve en todo momento:
Quiero inspirar y acompañar a que cada persona encuentre su forma de vivir y trabajar en/con Calma.
Calma Studio es solamente una manera de canalizar todo esto y hacerlo llegar al mundo.
La completencia nos permite ser consientes de la variedad del mercado y nos incentiva a seguir mejorando pero, también, nos permite darnos cuenta de que entre todos nos complementamos porque cada uno ofrece los servicios y los realiza de formas muy diversas. Se trata de ser fiel a tu porqué.
“Cuando compites contra todos los demás nadie quiere ayudarte, pero cuando compites contigo mismo todos quieres hacerlo.”
Simon Sinek
Y eso es lo que hago cada día, mejorar y evolucionar para vivir y trabajar en/con Calma. Así, feliz de vivir dentro de un archipiélago, abro las puertas de mi isla paradisíaca a todas aquellas personas que conecten con ella y que deseen que nazca su propia isla -marca- para vivir la vida que quieren y cómo quieren.
Si estas reflexiones te han removido estaré encantada de saberlo. Si quieres que hablemos de tu empresa, también. No dudes, nunca, en contactar conmigo. Estaré feliz de leerte.
Un abrazo intenso ,
Judit